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No tengo por costumbre contestar a las alusións directas o indirectas que tanto le gusta hacer a O Noso Alberto de vez en cuando, casi siempre sin citarme por el nombre, porque ya sabemos que O Noso Alberto tiene problemas de memoria y casi que siempre recuerda unicamente que «había nieve». Pero creo que la ocasión bien merece hacer una excepción. Que conste que lo hago por él. Para que deje de vivir en el pasado y ayudarle a mirar hacia adelante, para que nada, y menos los fantasmas del pasado, detenga su maduración como persona y como líder político.

Por enésima vez, y como hace siempre que le preguntan por la insoportable manipulación que ha impuesto en la CRTVG y delante de la cual se rebelan los profesionales, ha vuelto a citar el famoso episodio en el que la Vicepresidencia de la Xunta reclamó a los informativos de la TVG que dejasen de usar la imagen del vicepresidente Anxo Quintana para legitimar con unos segundos en los Telexornais la ocultación sistemática de su figura y su trabajo. El entonces director general de la CRTVG, Benigno Sánchez, antes presidente del Consello Gallego de Relacións Laborais con Fraga durante seis largos y felices años, había dirigido una supuesta carta al vicepresidente quejándose de estar sometido a una insoportable presión por mi parte. La conclusión de O Noso Alberto ya la pueden imaginar: para manipuladores de los medios públicos, los nacionalistas.

No voy a discutir semejante tesis porque no me corresponde a mi juzgarla. En todo caso, la juzgó la ciudadanía, que dio a la TVG del Bipartito los mayores índices de audiencia de su historia. Lo que sí merece un repaso es el argumento de que una manipulación justificaría la otra, porque ni somos todos iguales ni manipulamos todos igual; en eso, también, todavía hay clases.

En cualquier caso, este cuento pasó hace diez años, ya va siendo hora de que lo superes, Alberto. Madura y hazte un hombre, que lo que pasa en la administración gallega y en los organismos públicos autonómicos es tu responsabilidad

Puede que yo manipulara la TVG, pero debía ser una manipulación muy discreta porque a mi nunca me dimitieron presentadores ni editores de informativos, incluso hubo una editora que me grabó en secreto, empleando un estudio de la propia TVG, para publicarlo después. De hecho y ahora que lo pienso, el único que dimitió fui yo. Tampoco se vestían de negro los viernes para protestar porque no les dejaban hacer su trabajo y será porque entonces les dejaban y ahora no les dejan. A no ser que O Noso Alberto esté insinuando que los profesionales de la CRTVG eran unos vendidos al Bipartito y ahora sólo les mueve el sectarismo y la manía que le tienen al PP.

Puede que yo manipulara la TVG, pero en todo caso era una manipulación rara porque nosotros lo único que pedíamos era no salir en la televisión, como reconoce el propio Benigno Sánchez en la carta citada por O Noso Alberto en el Parlamento. Los manipuladores sin clase presionan para salir todo el día en la televisión, como pasa con O Noso Alberto, que no hay momento del día que no nos informen en la TVG de dónde y a quién le está haciendo el bien. Manipular es presionar para que te saquen guapo y no te saquen las cosas feas. Pedir que no te saquen como protesta por la manipulación se llama de otra manera, aquí y en la China Popular.

Puede que yo manipulara la TVG pero, en todo caso, se trataba de una manipulación algo estúpida porque esa presión tan insoportable, no les impidió, por ejemplo, ni a la TVG ni a la RAG, dar en directo, sin límite de tiempo, mi comparecencia en los juzgados en el famoso caso de los carteles, que acabaría archivado con el ridículo histórico de la Policía autonómica y el conselleiro Méndez Romero. Justo lo contrario de lo que pasa hoy, por ejemplo, con la orden de no pasar de cuarenta segundos para hablar del caso Gúrtel, o las fotos de O Noso Alberto con su amigo del alma, Marcial Dorado, que nunca se ven por la TVG, ni siquiera las contadas veces que se habla de ellas.

A diferencia de O Noso Alberto, yo tengo respeto por los profesionales de la CRTVG y sé que ya hace tiempo que no se dejan manipular sin protestar. También tengo respeto por los gallegos y su inteligencia y sé que cuando los medios públicos no están manipulados baten récords de audiencia, como sucedía con el Bipartito, con una audiencia media que se situaba en el 15% batiendo a las grandes cadenas estatales; pero que cuando están manipulados caen a plomo, como ahora con O Noso Alberto que a duras penas llegan al 10%.

En cualquier caso, y desde el cariño y el respeto que te tengo, este cuento pasó hace diez años, ya va siendo hora de que lo superes, Alberto. Madura y hazte un hombre, que desde hace nueve años gobiernas tú y lo que pasa en la administración gallega y en los organismos públicos autonómicos es tu responsabilidad. Los profesionales de la CRTVG no se visten de negro por culpa de Antón Losada, se visten de negro por culpa de O Noso Alberto. No van de luto por mí, van de luto por ti.

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